
El Jueves se nos apago una luz, dejo de iluminar el firmamento una de las mayores y más brillantes estrellas que la historia de la música y del mundo haya conocido. Se nos fue Michael Jackson para no volver, aunque sólo ha desaparecido su ente corpóreo; su alma, su espíritu, su esencia no ha desaparecido de este planeta, por que seguirá vivo en el corazón de sus fans y en cada nota de cada una de las canciones en sus más de 45 años de carrera musical.
Se nos fue el hombre que nunca fue niño y deseo serlo con toda su alma, se fue uno de los hombres que más discos ha vendido en toda la historia de la música (750 millones de discos), para muchos una de las personas más extravagantes y frívolas que hubiera en el planeta, acusado de pederastia en muchas ocasiones. No creo que haga falta que cuente la historia de Michael Jackson, es de sobra conocido por todos que la vida de Michael nunca fue fácil y gran parte de la infelicidad y rarezas que caracterizaron su vida se deben a que nunca llego a encontrar la felicidad que ansiaba.
No nos queda más que desearle que en estos momentos haya conseguido esa felicidad y decirle que ha logrado lo que otros muchos hombres no han conseguido nunca a lo largo de su paso por la tierra, quedar grabado en el corazón la música. Hasta siempre Michael.
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