No han sido pocas las veces en que el alcohol y la droga se han cruzado en el camino de un músico. Tal vez la juventud, el dinero y la sensación de libertad que causa el estar de allá para acá, de concierto en concierto, son factores que empujan a caer en ciertos excesos. En nuestra memoria quedarán historias como las de Jimi Hendrix o Kurt Cobain, o sin ir más lejos la de Amy Winehouse. Tres historias, solamente tres de entre tantas otras. Las tres tuvieron un final fatal, pero afortunadamente estas historias no siempre acaban mal...

Corría la primavera del año 2000, y para Dream Theater la gira del álbum "Metropolis Part. 2: Scenes from a Memory" daba los últimos coletazos. Mike Portnoy, líder, compositor y baterista de la formación (hasta su salida del grupo en 2010), llevaba tiempo coqueteando con el alcohol y las drogas. Según él mismo confesó en una entrevista hace no mucho tiempo, día tras día durante 15 largos años había estado bebiendo y drogándose sin que esto interfiriese en su trabajo y en la relación con sus compañeros. Su compromiso le hacía llegar siempre sobrio a los escenarios, pero hubo un momento en que su adicción se cebó con él, y se hizo habitual verle "calentando" antes del concierto, y durante los solos de teclado.

La situación comenzaba a torcerse y empezaba a haber cierta tensión con el resto de la banda, pero Mike reconoció a tiempo que su adicción se le estaba yendo de las manos, y rectificó. Justo tras finalizar aquella gira, el 20 de Abril de 2000, tomó su última copa antes de entrar a formar parte del programa de rehabilitación de los 12 pasos de Alcoholicos Anónimos, e hizo que la asistencia a las reuniones fuera algo prioritario en su día a día, lo que finalmente le acabó salvando la vida, tal y como reconoció pasado algún tiempo.

Pero nada de esto tendría sentido en dSong de no ser porque lo que hoy pretendo contaros es que esta experiencia le sirvió como fuente de inspiración a la hora de componer la que sería la conocida como "Suite de los 12 pasos", una serie de 5 canciones distribuídas una a una en los siguientes 5 trabajos del grupo, comenzando en el "Six Degrees of Inner Turbulence" (2002) y finalizando en el "Black Clouds & Silver Linings" (2009). Estas 5 canciones suman un total de 57 minutos y 16 segundos en lo que viene a ser un álbum conceptual pero distribuído a lo largo de distintos trabajos.

Las 5 canciones a su vez se dividen en 12 pasos que tratan uno a uno cada paso de la conocida terapia de Alcoholicos Anónimos. Cuenta Portnoy que el proceso de escribir estas canciones fué muy terapéutico, pero que si cuando se lo propuso hubiese sabido en dónde se estaba metiendo tal vez hubiese escrito una canción que englobase a los 12 pasos y nada más.

A lo largo de estos 12 pasos hay muchísimos detalles y conexiones interesantes, mencionaré solo un par de ellas. Si os fijáis en el título de cada uno de los pasos estos empiezan todos por "Re", haciendo referencia a la palabra "Rehabilitation" (Rehabilitación). Un segundo detalle curioso es que el último paso finaliza de la misma forma que comienza el primero, como si de un ciclo se tratase.

Os dejo que descubráis vosotros algunos otros detalles ocultos, aunque no es sencillo, y debéis conocer en profundidad la discografía del grupo. Sentíos libres de explorar algunas referencias en la red mientras disfrutáis de este domingo.

Tracklist:

"The Glass Prison" (13:53), del álbum "Six Degrees of Inner Turbulence" (2002)

1. "Reflection" (5:52)
2. "Restoration" (4:07)
3. "Revelation" (4:08)

4. "Reflections of Reality (Revisited)" (6:30)
5. "Release" (4:47)

6. "Ready" (3:40)
7. "Remove" (4:46)

8. "Regret" (5:43)
9. "Restitution" (5:00)

10. "Restraint" (5:21)
11. "Receive" (3:56)
12. "Responsible" (3:30)