
“Mamá, no quiero ir al colegio” será, con total seguridad, la frase más repetida esta semana por los pequeños de la casa. La vuelta al cole viene cargada de IVA, polémicas escondidas en tuppers e imágenes de escolares llorando a las puertas de los centros educativos. Sin embargo, no son ellos los únicos que remolonean en la cama una vez que ha sonado el despertador; ni siquiera el miedo a crecer les pertenece en exclusividad. Todos estos terrores e incertidumbres, a priori infantiles, tienen cabida en “Mamá, no quiero ir al colegio” (“Tierra, trágalos”, 2010) de los murcianos Klaus&Kinski.
La historia de este dúo comenzó en 2005, cuando Alejandro Martínez le pidió a Marina Gómez cantar “Here comes the sun” de The Beatles para probar su estudio casero. Siete años después, con tres discos en su haber, aún siguen experimentando con sus propias canciones. Las letras de Klaus&Kinski rezuman ingenio, de ahí que sean uno de sus puntos fuertes junto con la experimentación musical. Esto se puede ver perfectamente en “Ojo por diente” (“Herreros y fatigas”, 2012), toda una declaración de amor “aunque escondieras un demonio marsupial que acabe por saltar, me quiera atacar y me dijera que me va a asesinar”.
Aquí os dejo “Mamá, no quiero ir al colegio”, un alegato contra el hecho inevitable de crecer; así es como Klaus&Kinski, gracias a la música, dan forma a un anhelo que todos hemos tenido alguna vez.