
Usemos una máquina para viajar en el tiempo y volvamos a los 90. Estaba en el instituto, leía comics a todas horas y no me comía un colín… empezamos bien, parece la definición perfecta de un friki :-(
En el aspecto musical, los Backstreet Boys (por cierto, ¿para cuándo un especial sobre boy bands?) volvían a las chicas locas y eran número 1 a nivel mundial. Pero un friki nunca escucharía a los BSB, por aquel entonces prefería bandas del sello nacional Subterfuge (aún más merecedor de un especial): Sexy Sadie, Australian Blonde, Undershakers, Najwajean, Mercromina… y el grupo de hoy: Los Fresones Rebeldes.
Mucho más poperos que los otros, con melodías más propias del pop ye-yé de los 60 que del pop de la época, y letras más infantiles e inocentes, este quinteto barcelonés era uno de mis favoritos. Y aunque los conocí a través de su éxito "Al Amanecer" (como casi todos), fueron canciones como "Si no lo (vas a decir)", "Bola de Cristal" o "El mensajero del verano" las que acabaron de convencerme.
Todos estos temas están incluidos en "¡Es que no hay manera!" (1997), su álbum debut. Un disco fresco, original y divertido que siempre me arranca alguna sonrisa... y puede que algún bailecillo friki, pero eso quedará entre los fresones y yo.