
De algunos grupos minoritarios salen temas irremediablemente buenos. Y si encima es un grupo de origen irlandés, mejor que mejor.
Todos conocemos los estereotipos sobre los irlandeses: violentos, borrachos, locos, vividores. Pero en el caso de Dropkick Murphys (ahora sí que veis la relación con Irlanda, eh) es algo diferente. Se formó como banda en los barrios de South Boston, repletos de trabajadores inmigrantes irlandeses, descendendientes de segunda o tercera generación en Estados Unidos. Y en lugar de llevar una vida clásica, decidieron ir un poquito más allá. No sin falta de trabajo, claro está.
Comenzaron mezclando algo de rock clásico con el repunte del punk de principios de los 90, pero pronto se centraron en una continuación de los sonidos de la música y estilo de Stiff Little Fingers. Pero claro: con su toque, un ligero olor a Irlanda, a su folk y a sus colinas.
Llevan dando guerra desde 1996, y lo que les queda. Su último disco de estudio, el octavo, es de 2013, por lo que parados no están. Pero hoy os dejo con The State of Massachusetts, de su disco "The Meanest of Times" de 2007. ¡Buen día!