
No es ningún secreto que soy un fan acérrimo del britpop, de sus variantes, de sus mezclas, de su evolución incansable o de su repetición continúa. Pero ¿qué puedo decir? Esas guitarras, esos tonos de voz y esos estilos con raíces tan profundas como la Reina Madre pueden conmigo, aunque me intente resistir.
Hay algo, no obstante, que me he dado cuenta con los años: aunque me emocione, investigue y escuche continuamente nuevas bandas, hay algunos discos a los que terminas volviendo. En mi caso, puedo decir esto con gente como The Frames, o gente como The Verve. Y cómo no: con Ocean Colour Scene.
Este veterano grupo que se lanzó a la fama internacional en el año 1996 sigue en activo como si fueran unos chavales, y la verdad es que su música no me parece que envejezca nada mal. Y algunas de sus canciones, son, como poco, memorables. Para muestra, un botón, como este The Riverboat Song, de aquel disco de 1996 llamado Moseley Shoals, que es historia viva y en funcionamiento del britpop.